El laberinto de la FilosofíaUna modélica obra hipertextual José Antonio Millán
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Diccionario
de filosofía en CD-ROM: autores, conceptos, textos. (2ª edición ampliada) Antoni Martínez Riu y Jordi Cortés Morató Editorial Herder, Barcelona, 1998. 16.500 pta CD-ROM para PC. 170 megas |
Estamos ante una obra
creada para el soporte electrónico, concebida ya como una tupida red de autores,
conceptos, imágenes y voces. Hay que recalcarlo, porque con excesiva frecuencia las obras
electrónicas son simples trasvases al disco de libros tradicionales, y eso se nota en la
infrautilización de recursos multimedia, o en la pobreza de estructura. Este Diccionario de filosofía, que ahora ofrece su segunda edición ampliada, ocuparía de imprimirse unas 8.500 páginas tamaño folio, lo que de por sí indica una obra extensa. Consta de 3.675 entradas (filósofos, conceptos, escuelas de pensamiento, ...), interrelacionadas mediante 40.000 enlaces hipertextuales. A un toque de ratón se despliegan bibliografías y citas, se aclara un concepto, o se relaciona un autor con su escuela. Además contiene 1.100 textos filosóficos y una cronología. Varios cientos de audios ayudan a conocer la pronunciación del nombre de autores (alemanes, franceses... o árabes), o de conceptos (¡sepa por fin cómo se pronuncia volksgeist!). Las imágenes son fundamentalmente retratos de los filósofos, aunque hay reproducciones de obras clave (como las ruedas de Raimundo Llull, el "padre" de la combinatoria), o esquemas (como tablas de verdad). A propósito, la presentación contiene un divertido y un tanto inquietante morphing que va enlazando rostros de filósofos, desde Platón a Heidegger. ¿A quién puede servir una obra así? Yo diría que es un CD-ROM de referencia imprescindible para cualquier persona culta. El campo Filosofía se ha tomado aquí con la amplitud que merece, lo que significa que se encontrarán conceptos lógicos, biológicos, psicológicos (la entrada de Piaget), de filosofía de la ciencia, cibernéticos... Por ejemplo, hay una entrada de "Inteligencia artificial", con enlaces a un conjunto de autores que va desde Llull y Descartes a Boole y Turing. Uno puede ir a la entrada de éste último, y de ahí al texto en que plantea su famoso test para responder a la pregunta: ¿pueden pensar las máquinas? Es inevitable pensar en las posibilidades didácticas de esta obra: al fin y al cabo, como sugieren los mismos autores, el pensamiento se construye como una red de relaciones, y los procedimientos hipertextuales sirven para reconstruirla. Añádase a esto que los textos tienen calidad, que el lenguaje es generalmente muy claro, que la obra dispone de buenos procedimientos de búsqueda en el interior de las entradas, y que el usuario puede hacer sus propias anotaciones. No sólo estamos ante uno de los mejores diccionarios de filosofía existentes, sino ante una pulcra y sugestiva obra electrónica. |
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Publicado en El País, en abril de 1998 |