El encuentro entre la tipografía y el ordenador

05 marzo 2009 9:09


A mí los Premios Príncipes de Asturias me traen bastante al fresco, pero un aspecto reciente me ha hecho gracia: Steve Jobs, el creador del Mac, es candidato al premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica. Cuenta Ramón Peco en Soitu que la idea proviene del sector de las artes gráficas, donde Apple empezó hace décadas a facilitar el trabajo tipográfico, y quien la ha impulsado es “uno de esos veteranos y fieles usuarios […], Ángel Luis Fernández, presidente de la Asociación de Empresarios de Artes Gráficas de Asturias (AGA), veterano maquero” .

Preguntándole sobre esa histórica fidelidad de las gentes de su gremio con Apple, nos cuenta que la clave está en la “coherencia” de los Mac, para ellos eso ha sido clave a la hora de obtener resultados exactos entre lo que se ve en pantalla y lo que se reproduce en papel. De hecho, nos explica que la fidelidad del sector está provocada porque desde hace muchos años Apple apostó por ellos al difundir el lenguaje de impresión PostScript y desarrollar las impresoras LaserWriter, que mantenían la fidelidad entre lo que aparecía en la pantalla y las pruebas impresas. Precisamente esa ‘coherencia’ de las tecnologías de Apple es el factor que señala como la principal clave de que la comunidad de usuarios en España naciese entre los profesionales creativos, pues estos “prefieren no comprar algo mediocre”.

Cita luego Soitu el discurso de Jacobs Jobs en la Universidad de Stanford, donde se pueden ver algunas de las claves de su creación:

Y mucho con lo que me encontré después como consecuencia de hacerle caso a mi curiosidad e intuición resultó no tener precio. Déjenme ponerles un ejemplo: Reed College [la Universidad que abandonó] ofrecía en ese momento la que quizás fuera la mejor enseñanza de caligrafía del país. A lo largo del campus cada cartel, cada etiqueta y cada cajón estaban bellamente caligrafiados a mano. Como había abandonado los estudios y no tenía que ir a las clases obligatorias, decidí ir a clases de caligrafía para aprender a hacer eso. Aprendí sobre tipografías ‘serif’ y ‘sans serif’, sobre el espacio entre las letras, sobre aquello que hace grande una tipografía. Era hermoso, histórico, artísticamente sutil de un modo que la ciencia no puede captar, y me pareció fascinante. Nada de esto tenía la más mínima aplicación práctica en mi vida. Pero diez años más tarde, cuando estábamos diseñando el primer Macintosh, todo esto volvió a mi mente. Y diseñamos el Mac con todo eso en su interior. Fue el primer ordenador con una tipografía bonita. Si nunca hubiera ido a ese curso universitario, el Mac no hubiera tenido varias tipografías o fuentes espaciadas proporcionalmente. Y como Windows simplemente copió a Mac, posiblemente ningún ordenador los tendría ahora. Si nunca hubiera decidido dejarlo [la Universidad] y hacer ese curso de caligrafía, los ordenadores personales no tendrían la maravillosa tipografía que poseen.

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2 comentarios

Gorki dijo...

Ya puedo descansar tranquilo,¡Por fin he podido corregirte en algo!. El discurso, no es de Jacobs, sino de Jobs, Steve Jobs, un discurso impresionante que si lo prefieres subtitulado en español lo puedes ver aquí http://felixmaocho.wordpress.com/2008/04/26/videojoyas-diacurso-de-steve-jobs/

05 marzo 2009 16:20
Luis Mondragón dijo...

Errata en “Cita luego Soitu el discurso de Jacobs…” Debe decir “Jobs”

06 marzo 2009 00:53