Guardan las medianeras memoria de las casas, de las fábricas que se apoyaron en ellas. Vemos a través de su perfil la forma que les coronó en vida: las terrazas planas (quizás con un cuartito encima), los tejados a dos aguas, los picos serrados de los talleres. Como las siluetas de objetos que dejaron las explosiones atómicas, muestran lo ido, pero aquí no han sido las fuerzas bélicas, sino la lenta explosión del tiempo la que ha aplastado toda una construcción llevándola a dos dimensiones. Cuando presentan además la huella de las habitaciones, es toda una casa fantasmal la que surge del muro: desde el perfil del tejado hasta la planta baja. Los edificios que permanecen gravitan con el peso de la casa muerta; por eso tienen un aire extraño, atemporal. Y cuando a la medianera y a la silueta se le da un nuevo uso, es el presente el que irrumpe a través de un agujero del pasado.
Barcelona, 2007
Barcelona, 2008
Barcelona, 2007
Valencia, 2008
Tokyo, 2008
Barcelona, 2008
Barcelona, 2007
Barcelona, 2006
Barcelona, 2006
Lisboa, 2006
(a Medianeras 1) (a Medianeras 2) (a Medianeras 4)
Creado el 11 de diciembre del 2008 |