Sonido de España
José Antonio Millán
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¿Qué le ocurrió al jubilado F.B.T. para que pasados los
sesenta años se dejara barba, descuidara sus deberes ciudadanos y emprendiera la
impresión de una octavilla, viajando a la capital de la nación para pegarla en su
principal avenida? Lo primero que destaca en ella es el retrato de un sujeto (gorra, barba blanca, actitud levemente desafiante), y una reproducción de su documento de identidad, anverso y reverso. La fotografía que aparece en el carnet ¾de seis años atrás, como se ve por la fecha de expedición¾ se parece mucho al retrato adyacente, salvo en la ausencia de barba. En el momento en que la hoja aparece pegada en la Gran Vía, el carnet lleva meses caducado. Su reproducción ocupa la mitad del espacio disponible. ¿Por qué está ahí? El DNI implica existencia civil. "¡A ver: el carnet!", es la primera interpelación de la Autoridad. Salir "con el carnet en la boca" era en tiempos ominosos la forma de desalojar un acto prohibido. F.B.T. salió a la vía pública "con el carnet en la boca". Por si acaso. El mismo título del impreso es ambiguo: "LIBRO POR EL BIEN DE LA HUMANIDAD". Puede significar "[Existe un (o anuncio un)] libro...", o bien "[Yo] libro [pero ¿qué es lo que libra?] por el bien...". Y en cuanto a "la Humanidad", hoy en día sólo dos especies de personas osan decir su nombre: dirigentes religiosos o políticos, pero de muy alto nivel, y luego gente como el jubilado F. No hay término medio. Comienza: "Día 8 de mayo, pasado por cámara de gas, sabedor Mesie Pavidiña Prefet de Mutua y las oficinas del ministerio del trabajo por encontrar tres firmas falsas de la Mutua, la firma de Mesie Pavidiña y Mesie Pompidu que a dicha casa de Mesie Pavidiña no habia llegado ninguna carta gases en el pueblo de P*, pagados por franceses. Sonido de España de Betera y de Jesús, hijos de la noche del mismo campo". ¿Quién ha sido "pasado por cámara de gas"? ¿El propio F.B.T, ese tal Pavidiña, o la totalidad del día (igual que decimos "pasado por agua")? Los gases afloran de nuevo al final del párrafo, en relación con el pueblo de P* (que es aquel en que nació nuestro hombre, según el DNI)... Entre medias surge una Mutua, el "ministerio del trabajo", firmas, cartas, falsificaciones: todo ello dibuja algún conflicto legal o burocrático. ¿Cuál?, no lo sabemos, pero el detonante último de estos frutos de farola suelen ser los problemas con la ley, las denuncias de agravios. Por lo general intentan contar la verdad lisa y llana, puntualizar: "no habia llegado ninguna carta", dejar oír su voz. Aunque a veces no sepamos bien para qué. "LLEVAN EN EL AIRE; AL REY, PAPA, PARTE DEL GOBIERNO LOS CABEZILLAS Y EL CURA DE LA IGLESIA DE SAN CRISTOBAL". El párrafo se cierra, así, en un grito tipográfico. Las letras se han puesto de pie porque dicen algo muy importante. Sin embargo, este rosario de menciones, ¿es una imprecación, una súplica, o una visión? Tal vez un simple deseo: "¡así sean llevados por los aires el Rey, Papa...!". Continúa: "Sargento Juis de portero, Don J.R.M. conocidos en A*, porteros en dicho campo, Brigada Roja de capitan en Arranca Pinos, iden teniente Matamoros de comandante Antoni Estrillas Roja conociendoles a los tres en el ejercito estos tres en regulares Tetuan". Fin. La oración (como señalaría cualquier estudiante) carece de verbo principal, y por lo tanto es muy difícil saber qué hacen, o qué se les hace a los personajes enumerados: tal vez, sencillamente, están ahí. Respecto al "campo" de este párrafo y el anterior, ¿qué suponer? Los gases y los grados castrenses, el tono épico (Arranca Pinos, Matamoros) parecen sugerir un "campo de batalla", pero lo de "portero" es claramente futbolístico. ¿Y una misteriosa fusión de ambos? Hay que advertir que A* (también según el DNI) es la localidad donde ahora vive nuestro jubilado. Como Tetuán parece una alusión a sus tiempos en el ejército, y antes apareció su pueblo natal P*, es muy posible que las pocas líneas que constituyen este panfleto compendien la historia entera de F., en relación con la del mundo: nacimiento, guerra, paz y fútbol, ministerios, Francia y España, "Pompidu" y los cabecillas locales... Cierto que estamos ante un caso extremado, pero que no nos sorprenda la sintaxis, la puntuación anárquica o ausente del todo, la curiosa hilazón, la mezcla de referencias personales y generales. Mucha gente se expresa así, pero es muy raro encontrarlo por escrito, porque las palabras alcanzan al lector con tantas mediaciones ¾del mismo autor, del editor, del corrector¾, que acaban plenamente inscritas en las férreas convenciones del texto. Hace falta acudir a los primeros tanteos de una lengua (escritos medievales, por ejemplo) para encontrarnos algo semejante. El pasquín se cierra con la indicación del Depósito Legal. ¿Prurito legalista de su autor? ¿Imposición de un impresor que no quiere problemas? O, tal vez, un elemento verosimilizador más, que unido a los otros (tipografía, maquetación, jerarquías título/párrafos), sólo dice, desesperadamente, una cosa: "Soy un texto normal. Leedme, por tanto". |