Campaña
sobre iluminación religiosa
También en el corazon de México
(jul 2008)
La vela del velorio
(feb 2008)
Desde hace milenios el hombre ha dado a sus dioses presentes de fuego. El humo se eleva y el fuego consume la ofrenda, como una metáfora viviente.
Pero en muchos lugares, y desde una modernidad mal entendida, se ha empezado a sustituir el fuego por la electricidad, la llama por el filamento incandescente, la vela por la bombilla.
Semejante solución se adopta no sólo en la iluminación general o de los altares, sino incluso en las velas votivas que los fieles prenden (¿o debería decir accionan el interruptor?) normalmente a cambio de una limosna. El orbe cristiano está deslizándose hacia esta práctica que priva a los fieles de un acto de culto, y a todos de los elementos simbólicos, visuales y olfativos que han acompañado el diálogo con la divinidad desde hace tanto tiempo.
No hace falta ser un creyente para comprender que esta práctica, so pretexto de alejar peligros de incendio y mejorar la limpieza de los templos, es todo un desafuero simbólico y estético. Teológicamente, la ofrenda de un encendido eléctrico carece del valor de una vela.
Queremos desde aquí invitar a todas las personas sensibles que encuentren estos casos a dirigir cartas, firmes pero corteses, a los sacerdotes, ministros, párrocos u obispos correspondientes, para pedirles que pongan fin a esta situación.
Igualmente, invitamos a utilizar el signo que encabeza esta página en todo tipo de material que se pueda crear con este mismo objetivo.
NOTA: Hemos detectado esta preocupante situación en templos de confesiones cristianas (y de ahí la presencia de la cruz en el signo), pero esta situación se da también en otras religiones. Ampliaremos esta información... (Ampliada)
OTRA: Esta página no tiene por objeto coordinar ninguna campaña, sino simplemente denunciar una situación. No obstante, si desean hacer algún comentario, o enviar algún ejemplo, pueden hacerlo a portada arroba jamillan.com.
Última revisión, 11 de julio del 2008
