02 septiembre 2008

Délicieuse paëlla


La imagen superior (gracias, Simona) ha sido obtenida en el puerto de Brístol (Reino Unido) en unas fiestas de este verano. Y: ¡la de reflexiones que me inspira! Veamos...

Uno de los casos más típicos en que una lengua adopta una palabra de otra es cuando el término alude a una realidad antes desconocida, y que ha sido introducida por la legua ajena. El español adoptó en su momento los nombres relacionados con la música que le aportó el italiano, y en estos mismos días el inglés... bueno: eso daría para otro post de este blog.

¿Qué palabras ha prestado el español a otras lenguas en los pasados años? Por supuesto, fiesta, siesta, guerrilla, ¡pero también paella! Sí: el sabroso plato valenciano (que tomó su nombre del recipiente en el que se prepara), es ya una presencia en el panorama internacional. Hay 2.660.000 páginas web en inglés que incluyen la palabra paella, y 479.000 en francés.

¿Y la paëlla que aparece en el cartel de la fotografía? Pues se trata de la grafía francesa más extendida. Y el galicismo general de la referencia se comprueba viendo que el puesto anuncia "Délicieuse paëlla". Claro que, al lado, un castizo "Olé" (otro préstamo del español a muchas lenguas) recuerda la filiación del plato, al igual que la bandera rojigualda con el toro que medio se vislumbra en la penumbra del tenderete.

¿Y esta confusión babélica entre el nombre en francés, el plato español y el contexto inglés? Cosas de los tiempos que corren: desde esta Barcelona inundada de turistas que llevan sombreros mexicanos y compran burritos sólo puedo decir: así nos va...

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1 Comments:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Globalización.

02 septiembre, 2008  

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