Notas
 

(las referencias de autor y año remiten a la Bibliografía)

 

 

 

Parte IV: Campo de juegos

Capítulo 16. Sal, solecito

Capítulo 17. Doña Dírriga

Capítulo 18. Cali, cali, cali po, po

Capítulo 19. Rabia rabiña

Capítulo 20. Tengo, tengo, tengo

 

 

IV parte:
Campo de juegos

 

Capítulo 16
Sal, solecito

cura, sana

Correas (1627/1906), pág. 245. Véase el uso de “salmo” por el actual “ensalmo”.

Sal, sol, y dame en este ojo,

Pág. 242

Sal, solecito

De mi propia memoria familiar.

 Está también en Correas (1627/1906), pág. 243, unido a una curiosa serie de pareados errantes

Sal, sol, solito,
y estáte aquí un poquito;
hoy, y mañana,
y toda la semana;
aquí vienen las monjas,
cargadas de toronjas;
no pueden pasar
por el río de la mar;
pasa uno, pasan dos,
pasa la Madre de Dios,
con su caballito blanco
que relumbra todo el campo.
Aquí viene Periquito
con un cantarito
de agua caliente,
que me espanta a mí,
y a toda la gente.

Es curioso que la forma de diminutivo con interfijo, vigente hoy en España (“solecito”), se haya adaptado a la huella rítmica del probablemente más antiguo “Sal, sol, solito”. También se ajustan a ella otros diminutivos dialectales como el de Campos (1989). La ausencia de la primera sílaba átona (“Sal”) no perturba el ritmo de dos acentos por verso: 

Sol, solico,
caliéntame el hocico
pa hoy, pa mañana
y pa toda la semana

 Caracol, col, col 

Véase Lista de medios, 16.1

 A principios del siglo XVII 

Ledesma (1611), pág. 66 v.

Mariquita de Dios  

Pelegrín (1986), pág. 89. 

una novela de la Pardo Bazán 

(1887/2000), págs. 269-270

escuchó a finales del siglo XIX 

Henríquez Ureña (1931/2003), pág. 215 

 

Capítulo 17
Doña Dírriga

lo recordaba de su infancia Rafael Alberti 

Santos Torroella, Rafael (1992), pág. 224

el recopilador Rafael Rodríguez Marín

Rodríguez Marín (1882), pág. 197 

en la mayoría de las civilizaciones 

Calvet (1997), págs. 9-10 

que recogieron El Folk-Lore Andaluz 

Guichot, Alejandro (1882), pág. 184

María Chucena 

Para oírlo recitar, véase Lista de medios 17.1 

-Madre, notabre, sipílitabre,

Rodríguez Marín (1882), pág. 86-7

a quien se equivocara al pronunciar uno 

Guichot, Alejandro (1882), pág. 184, para todo este párrafo 

El cielo está enladrillado

Para oírlo recitar, véase Lista de medios 17.2

Hay uno en Correas (1627/1906, pág. 128), mezcla de trabalenguas y consejo laboral, que pone en acción un procedimiento similar 

Enmarañadora de madejas:
si las enmarañé,
bien las desenmarañé;
si las desenmarañaste,
por arriba las empezaste
y por la cabeza las tomaste.

(Enseña a las mozas cómo han de devanar las madejas.)

hace que se pronuncien palabras tabú.

Calvet (1997), pág. 20

Los cajones del obispo, 

Para oírlo recitar, en una versión ligeramente distinta, véase Lista de medios 17.3

No es insustancial juego de niños 

Micrófilo (1882), pág. 127 

No nada 

Correas (1627/1906), pág. 226 

Tinajita de zombodombón 

Ibíd., pág. 418 

Dime cuál es la casa 

Libro de Apolonio, apud Cerrillo Torremocha (2009, pág. 44). 

Pésame porque no me pesa 

Correas (1627/1906), pág. 38 

el uso de las sinécdoques 

Demófilo (1883), págs. 120-1

 

Capítulo 18
Cali, cali, cali po, po

Cali, cali, cali po, po 

Martín Escobar (2001), pág. 397

Para su uso como canción de dar palmas, véase la Lista de medios, 18.1 y .2 

canciones patrióticas y religiosas impuestas por el franquismo 

El Cancionero (1943), extensa obra para la formación de las maestras, ofrece una gran cantidad de canciones “populares” agrupadas por sus regiones de origen, para terminar con secciones de “Canciones antiguas y romances”, “Canciones de corro” (que incluye canciones de contar, como “Una, dos y tres”, pág. 523), “Religiosos” e “Himnos” (como el “Himno de las F.E.T. y de las J.O.N.S.” o el “Canto de la División Azul”).

en esos mismos años en Barcelona 

Informante B. 

proviene de un anuncio de helados 

La marca original era Calippo, que en España se empezó a comercializar en los años 80. Fuente 

Para el anuncio con la canción que está en el origen del juego de palmas, véase la Lista de medios, 18.3 

Las canciones de palmas, a veces dotadas de una “coreografía complicadísima” 

Véase Lista de medios, 18.4 

Don Federico mató a su mujer 

Riera Martínez (2013), pág. 77. 

Para verlo interpretado Lista de medios, 18.5 

(por ejemplo, en Colombia y en Argentina), 

Romero Contreras (2016)

se puede encontrar probablemente en un romance 

Según Ruiz (2016), pág. 79, en el romance “Los presagios del labrador”. De esa misma fuente, págs. 79-80, las variantes españolas del nombre del uxoricida. 

“El tío Tiruliru” 

Recogida en Santander, según García de Diego (1968). 

Y reparemos en que esta reduplicación que produce rima interna concuerda con algunas expresiones que analizaremos en el capítulo 33. 

“Toño Matoño”, “El cacique Pancho” 

Romero Contreras (2016) 

el comienzo de su letra española 

Versión de Los Mustang, también de 1966 (fuente):

Conocí a un capitán
que en su juventud
vivió en el mar.

Se puede oír en Lista de medios, 18.6 

Yo conocí, / a un profesor  

Riera Martínez (2013), págs. 78-9 

Para verla interpretada en el juego Lista de medios, 18.7 

Popeye 

Para la cultura negra, véase Jemie (2003), pág. 107; en Jamaica, Dance (1985), pág. 161 

Otra canción sobre Popeye, “de soga” o sea ‘de comba’: Lista de medios, 18.8

 

Capítulo 19
Rabia rabiña

Rabia, rabiña 

Sorprende verla convertida (probablemente ya sin contenido ofensivo) en canción de dar palmas (Riera Martínez, 2013, pág. 75). 

nananère

Fuente 

nyah nyah  

Fuente 

Béla Bartók

Véase la Lista de medios 19.1 y 2

quien se fue a Sevilla

Lo dan como refrán Sevilla Muñoz y Zurdo Ruiz-Ayúcar (2009), con una explicación histórica de su origen.

La gaznápira 

Berlanga (1990) 

lo que se van a comer los gusanos 

Ese dicho, reproducido por Berlanga en estilo indirecto, suele formularse así:

Lo que se han de comer los gusanos,
que lo vean los cristianos

En realidad, circula desde el XVII, y si no me equivoco, con un sentido opuesto (que la desnudez ajena no se debe ver). Correas (1627/1906), pág. 200, lo formula así: 

Lo que desean gusanos,
no lo vean cristianos

Y Correas añade, bastante absurdamente:

(Esto viene bien por los gusanos de la seda, que no quieren agua, y otros que dañan los árboles.)

dichos infantiles o juveniles escatológicos o procaces 

Para una pequeña antología, véase Rodriguez Pastor et al. (2000) 

aprovechan intercambios conversacionales triviales 

Hay muchas más. De mi infancia también: 

—¿Has visto la caja?

—¿Qué caja?

—¡La de la mortaja! 

—¡Por el culo te la hinco! 

No es un mero chascarrillo infantil: se pudo oír incluso en el pleno de un importante ayuntamiento. En el 2015 el concejal de urbanismo de Valencia lo soltó, creyendo cerrado el micrófono, al pronunciar la alcaldesa, Rita Barberá la cifra “veinticinco”. 

Véase Lista de medios 19.3

 Contexto.

What's cooking,
good looking?

Viene de una canción de Johnny Cash. Véase la Lista de medios 19.4. 

—What’s up,
butter cup? 

Hay un excelente testimonio bilingüe de estos usos. Se trata de una escena de la serie Big Bang y su doblaje al español. Éstas son las dos frases originales (Lista de medios 19.5): 

—What’s up,
butter cup?

—What’s the word,
hummingbird?
 

Literalmente: 

—¿Qué pasa,
pastelito de mantequilla?

—¿Qué dices,
colibrí?
 

Y éstas son las traducciones (Lista de medios 19.6): 

—Hola,
caracola.

—¿Qué pasa,
carapasa?

Hay que observar que la palabra “carapasa” es una construcción normal en Andalucía (y quizás en muchas otras partes de España). Proviene de la expresión “cara de”, con elisión de la d intervocálica y posterior asimilación de la e (cara de pasa > cara’e pasa > carapasa). Hay un divertido artículo sobre estas formaciones utilizadas como motes: Burgos (2008), que entre otros cita:

Carataza. Carapapa. Carapalo. Carapalio. Caracartón. Caralpargata.

See you later,
alligator

De Bill Haley & Comets.

Lista de medios 19.7

 

 

 

Capítulo 20
Tengo, tengo, tengo

Yo escucho los cantos

Esta es la versión más divulgada de estos versos, que tienen variantes significativas. Véase Machado (1907/1984), pág. 95, notas. 

una tesis sobre las cancioncillas vigentes 

Martín Escobar (2001)

Oigamos de nuevo a Claudio Rodríguez 

Rodríguez (1957/2004), pág. 42

Ningún sociólogo debería olvidar 

Sánchez Ferlosio (1974/2016), “Semana segunda” pág. 191

Tengo, tengo, tengo

Por ejemplo, en Campos (1989).

Para oírla por un informante, Lista de medios, 20.1 

desarrollarse enteramente en castellano 

Véanse las razones que da Ferré (1993), págs. 56-7, y su comentario por Riera Martínez (2013), págs. 5-6 

intervenir para que los niños no canten 

Nos referimos a campañas como Ruiz Repullo (s.a.).

 

 

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Bibliografía
Lista de medios

Página creada el 25 de febrero del 2017