Google Editions: ni librería, ni editorial, ni inesperado
19 octubre 2009 09:17
El lanzamiento de Google en la Feria de Frankfurt, Google Editions, ha sido sonado, aunque en absoluto "inesperado", en contra de lo que ha dicho la prensa (al menos desde el 1 de junio se sabía).
Google ha anunciado una plataforma para descarga de libros digitales que es a) independiente de un aparato específico (los libros comprados en Amazon sólo se pueden leer en Kindle, o en iPhone), b) accesibles con cualquier navegador web (por lo tanto, legibles lo mismo en un e-book dotado de navegador, que en un teléfono avanzado o en un ordenador), c) con posibilidad de ser leídos off-line (sin conexión a la Red), una vez que han sido descargados y d) con facilidades de subrayado, anotación, copia parcial e integración en una biblioteca virtual.
Google Editions aparecerá en el 2010, con una cantidad de títulos que se estima entre 400 y 600.000. Los mismos editores serán quienes pongan sus libros en Google Editions, y fijen su precio: Google será aquí sólo el distribuidor mayorista, aunque también podrá aportar el medio de pago: Google Chekout. En este sentido, tan incorrecto es hablar de que Google Editions es una "librería digital" (como dice EFE), como de que es un "editor en la Red" (El País).
Los libros se venderán, dice El País:
Con este movimiento (que es independiente de Google Búsqueda de Libros), Google se sitúa en un campo específico: no saca un lector (e-book) propio (a lo Kindle o Sony), ni crea una tienda exclusiva (a lo Amazon o Apple), sino que se convierte en 1) proveedor de digitalización y formato (véase lo que hablamos sobre los costes del libro electrónico); 2) intermediario para ventas de las editoriales (estén estas o no o no unidas a otra plataforma digital, es decir: de forma no exclusiva); 3) proveedor de medio de pago (absorbiendo la parte de negocio que podrían llevarse empresas de tarjetas de crédito o de pago en la red, como PayPal) y 4) con toda probabilidad, gestor de redes sociales de lectores al estilo de Librarything.
Se ha hablado sobre todo de los aspectos 1 y 2, pero para mí los 3 y 4 pueden acabar siendo los que tengan mayor interés...
Todo ello Google lo hará en un medio que le es conocido, y donde hace las cosas muy bien: aplicaciones puras de Internet. Al tiempo, su sistema de "acceso pero no propiedad" y posibilidad de copia sólo parcial, borrará fantasmas de "piratería" de la mente de sus partners editoriales.
Google ha anunciado una plataforma para descarga de libros digitales que es a) independiente de un aparato específico (los libros comprados en Amazon sólo se pueden leer en Kindle, o en iPhone), b) accesibles con cualquier navegador web (por lo tanto, legibles lo mismo en un e-book dotado de navegador, que en un teléfono avanzado o en un ordenador), c) con posibilidad de ser leídos off-line (sin conexión a la Red), una vez que han sido descargados y d) con facilidades de subrayado, anotación, copia parcial e integración en una biblioteca virtual.
Google Editions aparecerá en el 2010, con una cantidad de títulos que se estima entre 400 y 600.000. Los mismos editores serán quienes pongan sus libros en Google Editions, y fijen su precio: Google será aquí sólo el distribuidor mayorista, aunque también podrá aportar el medio de pago: Google Chekout. En este sentido, tan incorrecto es hablar de que Google Editions es una "librería digital" (como dice EFE), como de que es un "editor en la Red" (El País).
Los libros se venderán, dice El País:
directamente, o bien a través de la web del editor o, incluso, de una librería. Según la vía, Google se quedaría con un porcentaje distinto del precio final, que se movería entre un 15% si lo vende a través del editor, un 37% si lo comercializara directamente y un 55% si fuera a través de una librería online.Los autores individuales también podrían ceder sus libros a la plataforma (siempre y cuando sean propietarios de sus derechos electrónicos).
Con este movimiento (que es independiente de Google Búsqueda de Libros), Google se sitúa en un campo específico: no saca un lector (e-book) propio (a lo Kindle o Sony), ni crea una tienda exclusiva (a lo Amazon o Apple), sino que se convierte en 1) proveedor de digitalización y formato (véase lo que hablamos sobre los costes del libro electrónico); 2) intermediario para ventas de las editoriales (estén estas o no o no unidas a otra plataforma digital, es decir: de forma no exclusiva); 3) proveedor de medio de pago (absorbiendo la parte de negocio que podrían llevarse empresas de tarjetas de crédito o de pago en la red, como PayPal) y 4) con toda probabilidad, gestor de redes sociales de lectores al estilo de Librarything.
Se ha hablado sobre todo de los aspectos 1 y 2, pero para mí los 3 y 4 pueden acabar siendo los que tengan mayor interés...
Todo ello Google lo hará en un medio que le es conocido, y donde hace las cosas muy bien: aplicaciones puras de Internet. Al tiempo, su sistema de "acceso pero no propiedad" y posibilidad de copia sólo parcial, borrará fantasmas de "piratería" de la mente de sus partners editoriales.
Etiquetas: Digitalización, E-book, Editoriales, iPhone, Librerías
14 Comentarios:
Queda por ver como se ajustan en el tema del precio. Si quieren ganarse al usuario final, frente a la multiplicidad de canales alternativos, y frente a la feroz competencia que es de eperar, ocurra en el sector, tendrán que hacer una política de precios muy, muy ajustada a la realidad de lo que el usuario esté dispuesto a pagar. La batalla ha comenzado.
saludos
Encuentro desconcertantes los margenes de intermediacion que se barajan: entre 15% y 55%
Pero no quedabamos que los libros no se leen en la pantalla porque cansan. ¿Cómo es que Google saca este invento sin el lector correspondiente?
Sigo pensando que la pantalla no vale para leer libros, porque permite hacer otras cosas además de leer y los usuarios reclamen esos añadidos.
Yo no me veo leyendo "Los hermanos Karamázov" por pantalla, por más que la letra sea tinta digital. Yo quiero una versión de la novela adaptada al medio.
Mi opinión que la venta de libros digitales, o e-books, fracasará siempre que los editores se conformen simplemente con digitalizar libros de papel.
Yo tengo un CD con más de 6000 libros digitalizados de toddo tipo de literatura y época, desde clásicos a best sellers y nunca he esntido la tentación de leerlos.
Creo que si Google logra gestionar bien las redes sociales de lectores --algo que está en condiciones de hacer por su experiencia en MySpace y en YouTube-- el tema de los precios y los descuentos será el menos importante.
Nos guste o no, es Google quien mejor está entendiendo --y actúa en consecuencia-- de qué va "el libro en la nube".
Porque no será por los títulos en particular por los que la gente pague, sino por la posibilidad de crear comunidad red a través de ellos.
Por eso es tan triste la discusión que sostienen en estos momentos los editores españoles, donde la preocupación por el precio es central. Una preocupación sobre la que se han lanzado opiniones muy definitivas en las últimas semanas, pero sin ningún asidero en un modelo de negocio que aproveche las características de la web 2.0.
El "libro en la nube" no tiene ningún precio para el lector en red. Son las redes en sí --y en especial las redes premium-- las que le ofrecen valor agregado a su imaginario.
Al menos por ahora, y en el ahora estamos. Vamos, que como dijo Mike Shatkzkin en la última BEA, la existencia de Twitter y Facebook cambia radicalmente la manera de pensar la edición.
Sólo apuntar que pese a estar registrado en la presentación de Frankfurt, finalmente no pude entrar: la expectación era enorme y hubo "overbooking". Esperaré a ver el video cuando esté disponible.
Saludos cordiales.
Me parece inteligente por parte de google no apostar por ninguna consola concreta y abrir la posibilidad a leer las obras en ordenadores personales. Quizás estemos pensando aceleradamente que es necesario un nuevo gadget -un e-book- y no desarrollar los próximos PC's al futuro libro digital, como una función más.
En cuanto a la red social de lectores, lo veo más difícil. Ni myspace ni youtube me parecen modélicas, aunque sirvan de almacén de muchas cosas. Las pequeñas librerias y editoriales "brick and mortar" ya han comenzado a realizar comunidades en red con herramientas gratuitas como hacerse un perfil en facebook y divulgarlo entre sus clientes ya conocidos. Con lo que la fidelidad de la relación entre librero y lector comprador no se romperá solamente con la relación digital si las empresas físicas aprenden a manejarse en un entorno virtual.
Aunque google siempre tiene las de ganar... simplemente abaratando precios de productos muy vendidos como mayorista.
Creo que si Google logra gestionar bien las redes sociales de lectores
Redes sociales de lectores, suena bien, me parece un concepto interesante y prometedor, pero no sé lo que quiere decir.
¿Es una especie de club tipo Circulo de Lectores o algo parecido?
¿Es agrupar de alguna forma a los lectores según sus gustos de lectura?
#7 Gorki. Sí, son clubes, de lectura y de afirmación personal. Si quieres, de narcisismo. Pero bromas peyorativas aparte, el mundo de la red vive y se ha fragmentado en comunidades, y los libros digitales encontrarán allí su hábitat natural.
#8 Jaime. No hace falta que nadie los agrupe, se agrupan solos publicando sus preferencias. Un fenómemo interesante es el de LibraryThing: la gente trabaja gratis (y en algunos casos hasta paga) para catalogar sus bibliotecas, reales o imaginarias, y crear comunidad red, sea lo que sea que signifique este término ya acuñado que circula entre nosotros.
#8Julieta Lionetti
Yo pertenecí al Bookcrosing de Madrid que tenía como misión deshacer bibliotecas en vez de hacerlas. Nos desacíamos de los libros que no pensabamos leer nunca más, cambiandolos entre nosostros o abandonandolos por la calle.
Nos reuníamos una vez al mes, y en la reunión se comentaban libros que habíamos leído y se planeaban actividades culturales en conjunto, ir al teatro fundamentalmente, pero en barcelona hasta montaron u fines de semana en casas rurales par hacer filandones de poesía y cuentacuentos, también hacíamos crítica literaria de los libros que íbamos abandonando por la calle. Era divertido.
Hay muchas cosas que la gente está dispuesta a hacer por gusto e incluso paga por hacerlas.
Desgraciadamente dejo de funcionar al menos en Madrid.
A mí lo que me intriga es cómo harán para evitar la piratería. Quiero decir, ¿será como los pdf encriptados que venden para leer en Adobe Digital Editions?
#Mado Martínez. El próximo mes de enero habrá una conferencia en Nueva York. La organiza Digital Book World. Su organizador, Mike Shatzkin, comenta en su último post que hay importantes editores que están considerando que no se usen sistemas de gestión de derechos en los libros digitales.
Puede parecer una locura, pero es interesante pensar que el cambio que se viene debe tener en cuenta que la piratería es imparable.
Lo aprendieron las discográficas y no hay por qué no usar su experiencia.
Los DRM serán hackeados uno tras otro. No tienen futuro.
Se curaron en salud en los libros que tendran no. Entre 400 y 600.000, seguro que aciertan
EPUB es un contendiente del pdf: en esencia es un archivo .zip con otra extensión (.epub) El blog teleread hace gran campaña a su favor. Por cierto que ya hay una extensión de Firefox para leerlos (en verdad ya la había antes: Openberg; con ella era posible ver en Firefox archivos html que estuvieran dentro de un .zip -¡válgame!-). GoogleBooks y el Internet Archive ofrecen versiones en .epub . Yo diría que es ventajoso en cuanto a que es básicamente xml dentro de un archivo comprimido. Pero resulta que hay una variante de epub con DRM's ...
Personalmente creo que la piratería disminuirá con estas plataformas, puesto que, tener una copia aislada del libro, y que sus links apunten a servicios web ya inexistentes volverá a tal copia menos atractiva que a aquellas instancias del libro dinámicas, vivas en las redes sociales, a que recibirán ingresos por publicidad y suscripciones de uso baratas.
Excelente comentario, Anónimo. Muy iluminador.
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