La Britannica, más accesible
23 abril 2008 10:01
Hoy, día en que se conmemora tanto la muerte de Cervantes como la de Shakespeare, me complace utilizar este último enlace para que los lectores puedan llegar a la extensa entrada sobre el bardo de Stratford-upon-Avon en la Encyclopaedia Britannica, hasta hace nada reservada a suscriptores...
La famosa enciclopedia que deleitara a Borges fue editada primero en papel, luego en CD-ROM y por último en la Web, con sus entradas completas accesibles sólo mediante suscripción. Pero la edición de las obras de consulta y referencia (como bien saben nuestros lectores) ha experimentado grandes cambios con la llegada de la Web y sobre todo con la existencia de la Wikipedia. Ello ha conducido a importantes modificaciones en el comportamiento de sus editores: el último de nuestro entorno fue que la Enciclopedia Catalana abrió sus páginas.
La Britannica no era una excepción; como dice David Corral:
Pero ahora ha optado por un astuto movimiento: permitir a los editores de webs (que pasan un pequeño proceso de seleccion) que se registren gratuitamente durante un año, pero además que puedan enlazar a cualquier artículo de la enciclopedia, y que sus lectores puedan llegar hasta la versión íntegra, algo antes reservado sólo para suscriptores y que incluye no sólo el texto de la enciclopedia, sino acceso a artículos de revistas seleccionados y enlaces de la Web. Esto es válido para cualquier tipo de entrada, desde Shakespeare hasta pinball machine.
Arriba, todo lo que se ve de un artículo cuando se entra directamente. Abajo, vista parcial del mismo artículo (con las referencias complementarias a la derecha) en visión de suscriptor o... a través de este blog.
¿Qué gana con esto la Britannica? Notoriedad, page rank y quizás nuevos suscriptores. ¿Qué pierde?: probablemente nada. Y, si realmente tiene más calidad que otras opciones disponibles, ahora podrá demostrarlo.
Además, también se da ahora la posibilidad de incluir widgets en las páginas web, como éste:
Los widgets son pequeñas aplicaciones que ya están usando editoriales como Random House y HarperCollins para publicitar sus libros en webs ajenas.
En resumen: Britannica ha hecho un ágil movimiento comercial que reportará beneficios para todo el mundo: los editores de webs y blogs, sus lectores ... y ellos mismos.
La famosa enciclopedia que deleitara a Borges fue editada primero en papel, luego en CD-ROM y por último en la Web, con sus entradas completas accesibles sólo mediante suscripción. Pero la edición de las obras de consulta y referencia (como bien saben nuestros lectores) ha experimentado grandes cambios con la llegada de la Web y sobre todo con la existencia de la Wikipedia. Ello ha conducido a importantes modificaciones en el comportamiento de sus editores: el último de nuestro entorno fue que la Enciclopedia Catalana abrió sus páginas.
La Britannica no era una excepción; como dice David Corral:
Por cada página vista sobre Britanica.com, se ven 184 en Wikipedia. Este dato supone que mientras la prestigiosa enciclopedia británica tiene 3,8 millones de visitas en un mes, Wikipedia alcanza 21 millones de usuarios.Pues bien: la afamada Britannica había venido defendiéndose de esta situación con inteligencia: por ejemplo, del año pasado proviene su acuerdo con Google para permitir a los usuarios que así lo desearan añadir sus resultados a las búsquedas.
Pero ahora ha optado por un astuto movimiento: permitir a los editores de webs (que pasan un pequeño proceso de seleccion) que se registren gratuitamente durante un año, pero además que puedan enlazar a cualquier artículo de la enciclopedia, y que sus lectores puedan llegar hasta la versión íntegra, algo antes reservado sólo para suscriptores y que incluye no sólo el texto de la enciclopedia, sino acceso a artículos de revistas seleccionados y enlaces de la Web. Esto es válido para cualquier tipo de entrada, desde Shakespeare hasta pinball machine.
Arriba, todo lo que se ve de un artículo cuando se entra directamente. Abajo, vista parcial del mismo artículo (con las referencias complementarias a la derecha) en visión de suscriptor o... a través de este blog.
¿Qué gana con esto la Britannica? Notoriedad, page rank y quizás nuevos suscriptores. ¿Qué pierde?: probablemente nada. Y, si realmente tiene más calidad que otras opciones disponibles, ahora podrá demostrarlo.
Además, también se da ahora la posibilidad de incluir widgets en las páginas web, como éste:
Los widgets son pequeñas aplicaciones que ya están usando editoriales como Random House y HarperCollins para publicitar sus libros en webs ajenas.
En resumen: Britannica ha hecho un ágil movimiento comercial que reportará beneficios para todo el mundo: los editores de webs y blogs, sus lectores ... y ellos mismos.
Etiquetas: Cultura compartida, Dónde está qué, Editoriales, Lo hacemos entre todos, Lo que hay que hacer para vender...
5 Comentarios:
Por lo que veo el widget (qué palabreja!) se lo puede poner cualquiera en su web, no? No es algo sólo de los blogueros admitidos.
Gracias por la inforamción
En efecto, es así; veo que no quedaba claro en mi post: los widgets se los pone cualquiera. Para los enlaces al contenido completo hay que registrarse en Britannica y que te aprueben.
Lo que todavía no queda claro es hasta que punto la lista de temas de widgets para elegir será completa, ni tampoco si los blogueros tendremos la posibilidad de crear widgets de la Britannica "a medida". De momento, estamos esperando respuesta a la solicitud de registro para averigüarlo!
www.BEAT.cat
Los widget o gadgets, ya están siendo utilizados por varias paginas y blog web, porque dinamiza y facilita la interconexión entre páginas, como es en su esencia Internet. A propósito, pueden visitar la página de http://www.interlectores.com que utiliza este servicio.
Mis felicitaciones por el blog. Está buenísimo.
¡Y gracias por la información de los widgets!
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