Traducción y cultura

02 junio 2010 22:22

¿Qué hay en una traducción? A esta pregunta intentamos contestar, desde diversas perspectivas, desde este blog y el de al lado.

Un reciente hallazgo me ha hecho plantearme una cuestión: la de los distintos registros de original y traducción, dependiendo del destinatario previsto.

Nueva York es una ciudad completamente bilingüe inglés/castellano. Las comunicaciones de tipo oficial lo mantienen escrupulosamente. Este cartel de obras, que vi por distintos lugares, reza en inglés:

To anonymously report
unsafe conditions at this site
call 311

La traducción española dice:

Para reportar condiciones peligrosas
en un sitio [de] trabajo llame 311
no tiene que dar su nombre

Pasemos por alto algún calco sintáctico (“llame 311”), o la curiosa aparición del genérico “en un sitio [de] trabajo” (frente al específico “at this site”), para ir a lo que me interesa ahora. La traducción podría haber rezado: “Para reportar anónimamente condiciones peligrosas”. ¿Por qué se ha parafraseado en “no tiene que dar su nombre”?

Tengo una teoría: a la población hispana de Nueva York  se le ha atribuido un nivel cultural bajo. El adverbio “anónimamente” se ha evitado a propósito, por juzgarlo poco comprensible, y por eso se ha recurrido a la explicación. Lamentablemente, creo que también habría muchas personas anglohablantes (sobre todo las que no tienen el inglés como primera lengua, y Nueva York es una ciudad de inmigración) que tropezarían asimismo en el “anonymously”. ¿Por qué no se les ha ahorrado?

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2 comentarios

Mario dijo...

Creo que tienes razón: una buena traducción se caracteriza, igual que un buen texto producido por primera vez, por adaptarse al destinatario, y es muy posible que este ignorara la palabra

04 junio 2010 11:40
Jonathan Seckermann dijo...

De paso, la mala traducción der término “report” en inglés: Report > Informar, con carácter de denuncia.

Aunque, la acepción ‘report’ la traducen ‘reporte’: documento

27 julio 2010 00:24