Glíglicos y jitanjáforas

19 diciembre 2006 10:10

¡Que bellos los experimentos para crear sartas sonoras ininteligibles con apariencia de lenguaje natural! Un comentario de Sergio B. Landrove a una entrada del blog de al lado me suscita este tema. Así, a bote pronto recuerdo la jitanjáfora, el glíglico

Parte del encanto de estos juegos está en que nos ponen en contacto con elementos aparentemente periféricos de nuestra habla: el ritmo, el sistema fonológico, la melodía de la lengua… y al fondo queda, casí desvaído, el sentido. En alguna ocasión (pirueta máxima), de la palabra inventada nace la verdadera, como la suripanta surgida, creen algunos, de una jitanjáfora entonada por señoritas a las que se atribuía tradicionalmente moral dudosa, y que recibieron de ella el mote infamante. ¿Conocen los lectores más casos de falsos leguajes, y de su influencia sobre los verdaderos?

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Concurso de noviembre del 2006: soltero

05 diciembre 2006 11:11

Presentábamos esta lista de palabras:

salterio
solitario
silletero
saltarín
soltero
salitre
soltar

Y decíamos que dos de ellas tenían una relación muy íntima, ¿cuáles eran?

Las palabras relacionadas eran soltero y soltar, las dos derivadas del latín solvere, ‘desatar, soltar’. Dice el Diccionario etimológico de Corominas -Pascual (s.v. absolver) que soltero primero fue sinónimo de suelto (en el Libro de Alexandre figura “a rienda soltera”), y que después se especializó en el sentido de ‘no casado’, que ya tenía el latín solutus.

No deja de resultar divertido rastrear las metáforas (fósiles o no) que asimilan el matrimonio a una atadura: “ligar con los lazos matrimoniales”, “disolución del vínculo matrimonial“, …

El Diccionario de la Academia da, sin embargo, como origen de soltero el latín solitarius. ¿Habrá habido en algún momento una contaminación entre ambos étimos? He preguntado a quien sabe más que yo…

En cualquier caso, aquí están los ganadores del concurso de noviembre y el siguiente concurso: el del mes de diciembre.

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Comillas, nota y punto

04 diciembre 2006 10:10


Me pregunta el lector Juan Codina:

Le planteo las siguientes preguntas que no he visto tratadas en su libro Perdón imposible.
1ª.- Donde colocar el punto cuando se anuncia una nota a pie de página.
a) antes de la nota: “Cervantes nacio en Alcalá.*
b) después de la nota: “Cervantes nació en Alcalá*.

2ª.- Cuando hay comillas dónde colocar la nota y el punto.
a) nota antes de las comillas y luego el punto: “En un lugar de la Mancha*”.
b) nota despues de las comillas y luego el punto: “En un lugar de la Mancha”*.
c) el punto despues de las comillas y luego la nota: “En un lugar de la Mancha”.*

Estimado amigo: como expongo en el capítulo 22 de mi libro (aunque no hable específicamente de la llamada a nota), hay distintas escuelas respecto al cierre de las oraciones. Responderé a su pregunta 2ª, que encierra la primera: mi solución es la b), aunque otros apostarían por la c) (y creo que la a) no contaría con muchos adeptos). En el fondo, y como digo ahí mismo:

En cualquier caso, una norma que jamás debería olvidarse es mantener de manera uniforme la decisión tomada a lo largo de todo el texto.

De lo contrario, surgen casos tan feos como el que recojo en las notas en línea a ese capítulo (véase la nota a la página 156).

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Esdrújulas

03 diciembre 2006 21:21


Siempre lo he dicho: las palabras deberían dividirse en esdrújulas, llanas y agudás.

Pero no es de las inconsecuencias terminológicas de lo que quiero hablar, sino de los versos y canciones basados en la rima esdrújula, como por ejemplo Transoceánico, de Jorge Drexler (se oye en su sitio web, entrando por Música, y de paso doy las gracias a mi amiga Cristina Ruiz Guinazu por habérmelo descubierto). Empieza así…

Voy en este vuelo transoceánico
oyendo tus versos melancólicos.

Dice mi amigo Javier Candeira que todo cantante debería tener una canción con rima esdrújula. Y yo dije: ¡pero si prácticamente todos la tienen!

A ver cuántas pueden aportar los lectores…

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“Cocleta”

03 diciembre 2006 9:09


La palabra croqueta (que suele derivarse de la onomatopeya croc) es una de las que más variación experimenta en su pronunciación. Su grafía, en consecuencia también tiene notables modificaciones. Una cafetería barcelonesa ha tenido el humor de decorar su local con un panel donde figuran unas cuantas.

¿Conoce el lector otras palabras (aparte de la ya tratada sandwich) que presenten tan gran variación ortográfica?

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