Acampadas y cultura escrita
30 mayo 2011 10:10
Durante los últimos días he ido varias veces a la Plaza de Catalunya de Barcelona, a la acampada de los jóvenes indignados. Desde el punto de vista de los temas que nos ocupan en este blog, es de destacar la exhuberancia de la palabra escrita que se mostraba allí. Infinidad de carteles, pero también notas tipo post-it, escritas in situ y pegadas allí mismo (imagen de arriba, y detalle abajo).
Había, hechos mediante impresora, panfletos (de creación individual o distribuidos por sitios web) y carteles (espontáneos o también proporcionados por algunas webs).
También había pintadas por el sistema de estarcido (plantilla), que tiene mucha tradición en los mensajes políticos:
Pero la inmensa mayoría de los carteles, pancartas, notas y pintadas, de cualquier tamaño, estaban hechos a mano, incluido algún panfleto (luego fotocopiado, eso sí) . Realmente, es una sorpresa comprobar cómo la escritura manuscrita, que en general parece desterrada de nuestro entorno, puede rebrotar en cualquier momento, incluso en situación de florecimiento de escrituras digitales.
Por último, quería señalar cómo la acampada de Barcelon, entre otros elementos de infraestructura, disponía de una biblioteca, pequeña pero no mal surtida (la acampada de Madrid tiene una más grande). La biblioteca de Barcelona, al igual que tiendas, ordenadores y demás, fue destruida por la Policía en los en los graves incidentes que provocaron en la plaza.
Dada la cantidad de materiales que están generando estas acampadas (y los movimientos que tienen detrás), se agradece que hayan surgido iniciativas que se proponen su preservación.
7 comentarios
Estuve por ahí antes del intento de desalojo y tuve oportunidad de ver cómo la pequeña biblioteca iba creciendo y empezaba a catalogarse su contenido. Estuve de nuevo el viernes por la tarde, cuando la acampada se recuperaba de la intervención policiaca de la mañana. Y, a pesar de lamentar el desmantelamiento de la biblioteca previa, vi con gusto que se comenzaba ya a acumular nuevo material bibliográfico. La biblioteca era de las primeras cosas que se reconstruían.
Interesante reflexión sobre la palabra escrita. Da para pensar.
La biblioteca de Sol está bien surtida y crece día a día. La única pega que veo es que no hace préstamos. Y lamentablemente, leer en Sol es complicado si no te es fácil concentrarte entre el ruido de las conversaciones, y necesitas aislamiento, como es mi caso.
No obstante, la iniciativa es preciosa. Hay un cartel bien visible, que está desde los primeros días, en un kiosko de la salida del metro de Sol, el que da a la pastelería Mallorquina, que dice: “Lee más”.
Un enfoque completamente opuesto sobre el mismo asunto: http://criticartt.blogspot.com/2011/06/on-esta-la-comissio-de-cultura-i.html?showComment=1307392506941#c6552772647178095225
Silvia: creo que el artículo que enlazas no tiene absolutamente nada que ver con el tema de mi post…
Pues yo diría que sí, que vienen a ser dos caras de una misma moneda. En el tuyo y en el que he enlazado se contempla la proliferación de la palabra escrita en las acampadas con una visión muy distinta y la cuestión de la preservación pone el énfasis en patrimonios también distintos. Cada cual se preocupa por lo suyo.
Por cierto y como curiosidad: ¿qué veríamos si abrieras el foco en la pintada hecha con estarcido (por ejemplo)?
Y, de hecho, no sólo tiene que ver con esta entrada (con un enfoque distinto, insisto), sino con esta otra tuya, ya en la misma línea:
http://jamillan.com/bcnkaputt/2011/01/sos-monuments/