Copiad, malditos
02 mayo 2011 9:09
Hace tiempo que debía una reseña de este documental, el primero bajo licencia Creative Commons que ha emitido Televisión Española. ¡Copiad, malditos! es una interesante indagación sobre los derechos de autor, la creación, la copia y otros temas relacionados con la propiedad intelectual.
Su emisión y posterior difusión por la red ha puesto al descubierto maniobras para lavar el cerebro de los niños en estos temas. Véase lo que dice del documental el blog Educación musical.
En un momento es que Promusicae, Sgae y FAP difunden una guía para el buen uso de Internet (en PDF) para orientar a “padres, profesores y menores”, que entre otras cosas contiene esta definición de blog:
Blog: Abreviatura de “web log”, un diario o revista que se publica en Internet. Los blogs a menudo se utilizan para publicar enlaces a archivos, que pueden ser copias ilegales de música, películas u otros ficheros multimedia
es importante difundir que hay alternativas a la visión del consumo cultural que promueve la industria. Hacktivistas ha contribuido ofreciendo una “Guía para madres y profesoras” a la Música, cine y televisión legal, libre y gratuita en Internet.
Etiquetas: Cultura compartida
7 comentarios
José Antonio,
Este es un tema muy complejo y se está comiendo el coco a la sociedad tanto de un lado como del otro. Tan sólo debieran abanderar este debate sus protagonistas, es decir, las personas que crean. De no ser asi, mi postura va a ser la de mera espectadora, porque sé muy bien quienes impulsan este debate, y no me gusta. No me gusta que Telefónica se beneficie de esta campaña, porque ellos no crean y pecan de lo mismo que critican a la industria editorial. Cansa tanto maniqueismo. La pirateria beneficia a Apple y Telefónica, y ellos impulsan el debate con su poder titánico. Tan solo personas como tú, u otros creadores y escritores que valoran y respetan la creación debieran abanderar este tipo de propuestas. Ni con unos ni con los otros. Siempre con los creadores.
Y la sociedad está tan poco acostumbrada a valorar la creación, la original, que en Twitter ya se están haciendo verdaderos esperpentos de plagio a costa de la cultura compartida; no se cita, etc. Si es que falta respeto y un debate serio. Vamos a tener que pedirle a Balbin que vuelva con “La clave” y nos lo brinde…
Lo que se llama “la visión del consumo cultural que promueve la industria” es la visión que respeta escrupulosamente la legalidad vigente y por tanto la visión promovida por los gobiernos de España (el presente y los anteriores) y por la Unión Europea. Por suerte esas “alternativas” que se sugieren, al estar elaboradas sin ningún rigor y para más inri por personas que se esconden en el anonimato, no llegarán muy lejos.
¿Que hay en contra de la licencia Creative Commons? ¿No son autores los que se acogen a ella? – No comprendo tanta suspicacia.
Lo único que se afirma en este vídeo y podemos creerlo o no, y yo me lo creo, es que el músico que hacia la banda sonora de este vídeo, es decir un creador, tuvo mucha dificultad para hacer la banda de este vídeo con este tipo de licencia, porque la SGAE no se lo permite fácilmente.
¿Respeta SGAE la voluntad de los creadores?
Gorki :
Nada en contra de la licencia Creative Commons, al revés. Nada en contra de que haya debate, todo lo contrario. Pero debates más amplios, más plurales, con todas las voces, y con creadores que “la abanderen”.
porque sé muy bien quienes impulsan este debate, y no me gusta´
Por suerte esas “alternativas” que se sugieren, al estar elaboradas sin ningún rigor
¿No es esto ser suspicaz?
La filosofía del compartir, la que defiende el cocepto copyleft, tiene dos normas básicas, que se pueden discutir y compartir o no, pero que son tan válidas y rigurosas como las que defiende la filosofía privativa, la que defiende los derechos de autor.
Una regla es que la división entre productores (artistas) y consumidores (receptores) es artificial. Todos y todas creamos de muy diferentes maneras. Una escucha de un concierto es una re-creación. Una lectura, también. La observación detenida de un cuadro, también.
La segunda es que la creación es muy abundante, por lo que compartirla no perjudica a nadie. En cambio, las leyes que defienden el conocimiento privativo parte de la tesis de la cultura es un bien escaso, que sólo pueden proporcionarnos algunas mentes privilegiadas.
Contaré un caso personal. Creo que tiene que ver con la pobreza del debate que tenemos sobre derechos de autor. Y creo que el documental, como dice JAM, es muy interesante, bien trabajado y enormemente divulgativo.
El otro día tuve una reunión con una periodista y un cámara de TVE. Junto a otras personas nos reunimor porque quieren grabar un reportaje largo, unos 50 minutos, sobre movimientos sociales en Madrid. Bien. En un momento dado, nos piden si pueden coger imágenes de un cortometraje elaborado por nosotras y nosotros. Les decimos que sí, siempre que citen la autoría correspondiente. Está licenciado con licencia CC-By-SA. Primera sorpresa: no conocen este tipo de licencias. Se dedican a cuestiones de imagen, pero son funcionarios. Bien. Les decimos que hay manuales que informan sobre este tipo de licencias, clases y compatibilidades. Además, les comentamos el programa “¡Copiad, malditos!” Un documento pedagógico donde se explica qué diferencias a las licencias libres de las privativas. Además, emitido hace un par de semanas por su cadena: TVE. Segunda sorpresa: no conocen el documental. No es que no lo hayan visto, sino que ni siquiera saben que existe.
Al final de la reunión, nos preguntábamos si los trabajadores de la BBC recibirán formación sobre licencias libres, si se reciclaran con cursillos y talleres para formarse en las nuevas formas de creación, las que están surgiendo con la aplicación y desarrollo de las nuevas tecnologías. En TVE, por lo visto y oído aquella tarde, NO.
Todo esto les sonaba a chino. Y son profesionales que viven de la comunicación audiovisual.