El orden de los libros

08 mayo 2007 16:16


Tras la retirada, el transporte y por fin la sedimentación. Entonces uno se enfrenta a un dilema: o ir abriendo poco a poco las cajas de los libros, y disponer cada uno de ellos en su lugar preestablecido (condenado a andar errante entre cajas durante semanas), o colocarlos todos grosso modo para desembarazarse de los obstáculos, confiando al futuro la tarea de reordenarlos…

He optado por la segunda versión, lo que me condena de entrada a una biblioteca desordenada. Incluso el más descuidado de los poseedores de libros sabe bien dónde está ése o aquél, o en qué esquina recuerda haber visto tal otro. Pero quien tiene una biblioteca barajada está frente al caos.

Hay una bonita frase de los últimos momentos de Severo Sarduy, cuya fuente me impide comprobar precisamente esa situación. Hablaba el gran escritor cubano de los preparativos para su desaparición, embarcado en una enfermedad incurable, y comentaba que la esperaba (entre otras cosas) con su biblioteca en orden. Un buen servicio para el que llegara después…

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6 comentarios

Libia dijo...

Ojalá pronto puedas acomodarlos como diosmanda, que es como a ti te sirvan. COmo estás ahora suena a una situación que, en esta profesión, debe ser terrorífica: ¿Dónde está el tercer tomo de las obras completas? Julito, ayúdame a buscarlo, que en qué caja estaba, ¡cómo voy a saber!, es verde; sí, es igual a ese pero es el tercero, ese es el primero; no, no me sirve, el cuento que busco está en el tomo tres… (Brrr, de veras debe ser feo y luego que tú no debes tener pocos volúmenes) Hagamos un nudo mental: “y, cuando despertó, el desorden de su biblioteca era total”.Abrazo y toda mi simpatía.

10 mayo 2007 07:21
Gorki dijo...

Una de mis dudas es como ordenar una biblioteca privada. Si lo haces por temas, a un libro grande le acompaña uno pequeño, por ejrmplo emparejar el Atlas de Aguilar y la guia de viajes de Michelin, lo que te obliga a tener estanteriás muy grandes y muy desaprovechadas en su capacidad de guardar librosSi lo haces por colecciones o mas o menos por tamaños, mejora el rendimiento pero es dificil volver a localizar un libro. Por otra parte está la cuestión estética. Después de duras peleas con mi mujer, he llegado a una “entente cordial”, en el salón manda la estética y solo se ponen los libros bien encuadernados y según la belleza del lomo y en mi despacho se ponen como a mi me parezca correcto.

10 mayo 2007 11:30
Virginia dijo...

Yo no es que tenga muchísimos libros, pero en mi último traslado tuve la misma duda y opté por colocarlos de cualquier manera, pueden estar las aventuras del “Petit Nicolas” (de Sempé-Goscinny) junto a las memorias de Buñuel. A pesar de mis propósitos iniciales de “ordenar”, ahora no tengo ninguna duda de que es así como mejor están, incluso encuentro cierto orden en el caos. (¡Quién diría que fui bibliotecaria!)

11 mayo 2007 20:01
José Antonio Millán dijo...

Gorki: yo ordeno por temas (masomenos), pero luego tengo una zona de libros grandotes. Lo aprendí de las librerías americanas (buenas), que lo tenían todo por materias, y a lado un estante de “Oversized”.Virginia: las peores señoras son las que fueron criadas, los cómitres peores antes fueron galeotes, etc. ¿Adivinas cuál es el destino libresco de las ex-bibliotecarias?;-)

14 mayo 2007 18:16
José Antonio Millán dijo...

Y Lib Bren: cuando despertó, el desorden de la biblioteca no era total (lo cual habría sido estupendo, en plena efeméride lovecraftesca: ¡el puro Caos Reptante!). No: hay un remedo de orden, que procede de la colocación original barajada por los avatares del transporte. Horrible…

14 mayo 2007 18:54
Anonymous dijo...

El orden de una biblioteca creo depende mucho del tamaño, esto es, del número de libros. Yo tengo unos 1200 y los tengo colocados por temas: en la dos primeras estanterías historia, en la otra novelas, … Y como de historia tengo mucho, pues la zona la he dividido en historia de España, de Galicia (mi tierra) etc. Deentro de cada “zona” dejo el estante más cercano al suelo de mucha más altura, donde coloco los libros enormes, pero siempre dentro de su “zona”. Para una biblioetca pequéña-media creo que el sistema funciona perfectamente.

02 septiembre 2007 23:58