Foro Publidisa en Madrid

16 abril 2009 9:09


El 7 de mayo del 2009 en Madrid tendrá lugar el Foro Publidisa, con el siguiente programa:

11:00?11:15 Presentación, estructura y dinámica del evento
Pedro Álamo
11:15?11:30 Bienvenida
Luís Abril
11:30?12:00 Al borde del libro; el entorno digital del editor
Pablo Arrieta (Colombia)
Arquitecto, Consultor Experto en Nuevas Tecnologías. Ha trabajado en USA en Compañías como Macromedia y Adobe
12:00?12:30 eBook cadena de valor y modelo de negocio
Jose María García
12:30?13:00 Edición Digital 2.0. El Caso Harlequin
Luis Pugni Director General
de Editorial Harlequin Ibérica
13:00?13:30 DAD, DRM, XML y ePub. Lo que todos deberíamos conocer
Luis Francisco Rodríguez

14:30?15:00 Librerías, eBook y eReaders. La Experiencia Watersotones
Waterstone?s UK. Primera cadena de librerías en Europa en comercializar el Sony eReader
15:00?15:30 La experiencia www.gandhi.com.mx
Alberto Achar
Gerente de Mercadotecnia de Librerías Gandhi
15:30?16:00 La Biblioteca Virtual
Enrique Rubio
Director de la Biblioteca Virtual Cervantes
16:00?16:30 eBooks, lectores, hábitos y dispositivos
Javier Celaya
Consultor. Socio fundador de Dosdoce.com
16:30?17:00 Marketing Online. Cómo posicionar los contenidos en la red
Begoña Morilla
17:00?17:30 Debate
Panel final con todos los ponentes
17:30?18:00 Resumen y conclusiones
Pedro Álamo

Etiquetas: , ,

Sobre Gabriel Ferrater

15 abril 2009 9:09

Gabriel Ferrater fue uno de los más grandes poetas del siglo pasado. Escribió sobre todo en catalán, fue lingüista y realizó muchos trabajos editoriales.

Enric Juste acaba de hacer sobre él un documental, cuyo trailer ofrecemos abajo. El blog de apoyo al documental contiene materiales de mucho interés, como este post sobre el oficio de traducir.

http://vimeo.com/moogaloop.swf?clip_id=3564686&server=vimeo.com&show_title=1&show_byline=1&show_portrait=0&color=&fullscreen=1
Tràiler Metrònom Ferrater from Enric Juste on Vimeo
.

Etiquetas: ,

Gonzalo Pontón y Crítica

14 abril 2009 9:09


El tráfago de los pasados días me ha hecho casi pasar por alto el hecho de que Gonzalo Pontón, el fundador y director de Editorial Crítica, ha sido jubilado forzosamente por Planeta, el grupo editorial propietario actual del sello.

Pero ahora me encuentro con una carta del propio Gonzalo Pontón, quien espero me perdone por sacarla a la luz pública:

Quizás ya sepas por la prensa que Planeta ha decidido jubilarme como consejero delegado de CRÍTICA, la editorial que fundé en 1976 y que he dirigido ininterrumpidamente durante 33 años.

Todas mis negativas a la jubilación que se me impone (es cierto que acabo de cumplir 65 años), así como la propuesta alternativa que he dirigido a Planeta para comprar sus acciones (es el socio mayoritario de CRÍTICA) han sido inútiles. Planeta ha tomado una determinación innegociable. Sin embargo, no me doy por vencido y seguiré tratando de recuperar mi editorial por todos los medios incluidos los legales o, alternativamente, exigiré la venta de mis acciones a Planeta (estoy obligado a ello por un contrato entre socios que firmé hace diez años), ya que sus directivos me han expresado personalmente que, aun reconociendo que CRÍTICA siempre ha obtenido beneficios, a su juicio pueden incrementarse mucho cambiando la línea editorial.

Como podrás comprender, no deseo sancionar con mi presencia, ni como asesor (que se me ha ofrecido) ni como accionista, una línea editorial que nada tenga que ver con lo que CRITICA ha venido ofreciendo a la cultura de lengua española desde el fin de la dictadura hasta hoy. La buena noticia es que por el momento Planeta ha reconfirmado en su cargo a Carmen Esteban como directora editorial de CRITICA.

Nunca he tenido relación profesional con Crítica, más allá de reseñar alguna obra suya en la prensa, de modo que mis palabras inmediatas no las moverá ningún interés directo. Por decirlo rápidamente: debo a la Editorial Crítica algunos de los mejores momentos intelectuales que me ha deparado la lectura en los últimos años, en áreas muy variadas.

La edición es un oficio muy personal, por desgracia o (como en este caso) por suerte. Sería incomprensible la existencia del fondo de Crítica sin su forjador, así como resulta difícil pensar en que se mantenga la línea editorial sometida a más presiones económicas.

El grupo Planeta se ha caracterizado por adquirir numerosos sellos y luego cambiarlos y desvirtuarlos hasta el extremo de que uno se pregunta que para qué los compró… Su política de sustituir a los editores por responsables de sello recuerda poderosamente lo que André Schiffrin llamó La edición sin editores. Con esas operaciones no sólo se pone en riesgo la evolución natural de una línea editorial, el futuro, sino también la preservación de un fondo creado a lo largo de décadas: el pasado.

Ojalá se logre encontrar alguna fórmula que permita la preservación del sello.

Etiquetas:

Leer sin papel

13 abril 2009 9:09

El pasado 9 de abril publiqué un largo artículo titulado Leer sin papel en la sección de Opinión de El País. Aproveché esa oportunidad para recordar algo que con frecuencia se pasa por alto: que leer en pantalla no es necesariamente lo mismo que leer en papel.

A continuación voy a proporcionar las referencias de los testimonios citados en el artículo (no lo repetiré íntegro, porque está fácilmente accesible en el primer enlace, sino sólo los párrafos que quiero comentar):

Cuando le preguntaron a un especialista cuál sería el futuro del libro contestó: “Si por libros entendéis nuestros innumerables cuadernillos de papel impreso, plegado, cosido, encuadernado bajo una cubierta que anuncia el título de la obra, reconozco francamente que creo que la invención de Gutenberg caerá más o menos próximamente en desuso como intérprete de nuestras producciones intelectuales”. Terrible predicción… que fue formulada hace más de un siglo, en 1894. Lo que entonces se suponía que iba a terminar con la lectura en papel era la grabación fonográfica.

La cita proviene de un cuento de Octave Uzanne, “La fin des livres”, publicado en 1894, dentro de la recopilación Contes pour les bibliophiles, que he leído en la edición de Éditions Manucius, Houilles (Francia), 2008, y que también está disponible en una edición posterior en el Internet Archive.

Cien años después nunca ha habido más libros, pero ahora se anuncia que lo que va a desplazar al papel es la lectura en pantalla: en ordenador, en teléfonos avanzados o en esos aparatitos llamados lectores de e-books, libros-e o (como acaba de proponer el académico Darío Villanueva) portalibros.

[…]

Y es que leer no es sólo acceder con los ojos al texto. Si así fuera, lo más cómodo sería un artefacto por el que fueran desfilando las letras (al modo de los textos que corren en las marquesinas), como en el cuento de Isaac Asimov que transcurre en 2157 [Cuánto nos divertíamos]. Su protagonista recuerda: “Había una época en que los cuentos estaban impresos en papel. Era divertidísimo leer palabras que se quedaban quietas en vez de desplazarse”. Es difícil que llegue este libro futuro de palabras móviles porque el lector común no lee letra a letra ni palabra a palabra sino que se administra a bloques, mediante saltos de los ojos, las porciones de texto que va descifrando.

[…]

Los lectores electrónicos además aplanan el texto, suprimiendo las distinciones tipográficas y espaciales que lo jerarquizan a los ojos del lector. Hay que señalar que aquí radica también una de sus ventajas, porque permiten aumentar el tamaño de la letra para lectores con problemas de visión. Pero en productos textualmente complejos como los periódicos la jerarquización tipográfica es vital. El poeta experimental Kenneth Goldsmith creó la obra Day (2003) reescribiendo en un tamaño de letra uniforme la totalidad del ejemplar de diario The New York Times del 1 de septiembre de 2000, incluidos anuncios y cotizaciones de Bolsa. La resultante fue un tomo de 836 páginas tamaño folio. ¿Un solo ejemplar de un periódico contenía tanto texto como un novelón? Sorprendentemente sí, pero sobre el papel la disposición espacial y los tamaños de letra van diciendo al lector qué importancia y uso tiene cada texto: éste para lectura, éste para hojeo, éste sólo para consulta.

[…]

¿Perdemos algo leyendo en pantalla? William Powers, columnista de la revista estadounidense The Nation, llamaba recientemente al papel “el arma secreta de los periódicos”: “La mayor fuerza del papel reside en el hecho de que la mente se asienta en un estado de tranquilidad apaciguada que da lugar a reflexiones más acertadas. Ese estado es mucho más difícil de lograr cuando se lee en formato digital donde la información es infinita y donde existen tantas actividades posibles en cualquier momento”.

En efecto: hay estudios que describen a los lectores de páginas web, incluso académicos, como “promiscuos, diversos y volátiles”, por su hábito de “picoteo” de páginas, lectura parcial y cambio frecuente de objeto.

Se trata de CIBER (University College, Londres), Information Behaviour of the Researcher of the Future, 2008, págs. 9 y 10.

No es extraño que surjan programas que, como Readability, despejan el contenido de una página web retirando todo lo que rodea al texto central (propuestas de otras lecturas, anuncios, barras de navegación), con el objeto de que el lector se concentre.

[…]

No es extraño que cambios aparentemente menores en la práctica lectora (como leer en un soporte material o en uno virtual) tengan consecuencias notables. La lectura es una actividad neurológicamente complejísima. Una obra reciente de la psicóloga Maryanne Wolf, Proust y el calamar, [Cómo aprendemos a leer : historia y ciencia del cerebro y la lectura] nos recuerda que el acto de lectura no es natural: en él confluyen mecanismos cerebrales surgidos evolutivamente con otros fines, y de hecho el aprendizaje de la lectura cambia el cerebro del sujeto que la practica, hasta tal extremo que lo configura de una determinada manera si lee en caracteres alfabéticos (como el español) y de otra si lo hace en ideogramas chinos.

Por otra parte, la especialista Anne Mangen [“Digital fiction reading: Haptics and immersion“, en Journal of Research in Reading, ISSN 0141-0423, Volume 31, Issue 4, 2008, págs. 404–419] nos recuerda “el papel vital de nuestros cuerpos, incluso en una actividad tan aparentemente intelectual como la lectura”: leemos con todo el cuerpo, y sobre todo con las manos y los dedos. Y también sabemos desde el Renacimiento que leemos en el espacio: quien haya preparado una tarea intelectual distribuyendo libros abiertos, obras de consulta y esquemas por la mesa de trabajo sabe lo difícil que es organizar y percibir la multiplicidad dentro de una pantalla. El lector como un homúnculo que se asoma por las ventanas de los ojos a la ventana de la pantalla es una construcción irreal y reduccionista.

[…]

Etiquetas: ,

Vacaciones

06 abril 2009 9:09


Este blog suspende sus intervenciones durante una semana por las (merecidas) vacaciones de Pascua.

Etiquetas:

Traducir del y al inglés

03 abril 2009 9:09

“La industria editorial española es la que más traduce de Europa, seguida de la de Alemania”, reseñaba Antonio María de Ávila en su capítulo sobre “La oferta editorial de libros” de La lectura en España. Informe 2008.

La traducción de obras del inglés ocupa un lugar prioritario en la producción de los países no-anglohablantes, sin embargo tanto el Reino Unido como, sobre todo, Estados Unidos, traducen poquísimas obras de otras lenguas. El estudio Literatura traducida: ¿Por qué es tan difícil acceder al mercado anglo-americano? analiza los datos de traducción de estos países, y los esfuerzos institucionales por fomentar que las obras de otras lenguas sean traducidas al inglés.

Etiquetas: ,

Publicidad intromisiva

02 abril 2009 9:09


Esta es la publicidad de Intel en La Vanguardia: un incordio que se despliega y cubre el texto que se pretende leer. ¿Se imagina que estuviera leyendo el periódico en el metro, y una mano le metiera un panfleto entre los ojos y el periódico? Pues este es exactamente el efecto.

No sé si tendrá mucho efecto publicitario: a mí lo que me provoca es ira contra el anunciante y contra el soporte…

Etiquetas: ,

Pe?as arriba

01 abril 2009 9:09


Una alerta de un amiga (gracias, Simona) me ha llevado a ver la cubierta de esta edición de Peñas arriba, de José María de Pereda, en Amazon. Ejem…

Pero lo curioso es que en una búsqueda de este libro en Amazon UK esta edición sea la más barata de los libros nuevos. ¿Quién la ha hecho? La editorial inglesa Echo Library, especializada en libros en letra grande, en el dominio público, y que imprime bajo demanda. En su catálogo, de inglés y español, no está sólo Pereda, sino también Pérez de Ayala, Concha Espina, Galdós y una selección de textos históricos y raros…

No sé si habrá mucho negocio internacional en los libros en español libres de derechos y en letra grande, pero si lo hay, sé perfectamente quiénes no se lo están llevando: las editoriales de países hispanohablantes.

Por cierto: hace años que no la releo, pero ¡qué novela más bonita es Peñas arriba…!

Etiquetas: , , ,