El poco interactivo Quijote de la Nacional

05 noviembre 2010 9:09

Acaba de abrirse al público el Quijote interactivo, de la Biblioteca Nacional de Madrid. Bienvenida sea cualquier iniciativa para divulgar nuestras obras culturales, pero se debía haber hecho mejor…

La aplicación presenta la primera edición digitalizada en imágenes, con la transcripción del texto. Éste no se puede descargar de la web, sino todo lo más hay que seleccionarlo y copiar y pegarlo, página a página. ¿quieres todo el Quijote?: repite la operación 668 veces

Esto es llamativo en unos momentos en que se puede descargar íntegramente un Quijote en Google Libros (en PDF o en versión para e-book), o puede bajarse capítulo a capítulo la edición del Instituto Cervantes (con notas) o la de la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes (sin ellas). ¿Qué objeto tiene vetar de este modo el acceso y la apropiación del texto en nuestra primera institución cultural? Porque además el texto de la obra, embebido en Flash, no es accesible a los buscadores externos. Quien busque “En un lugar de la Mancha” en Google o en cualquier otro buscador jamás podrá llegar a esta edición.

La obra no tiene índice de capítulos, con lo que mal lo tendrá quien quiera localizar un determinado episodio. Hay, sí, la tabla de capítulos del original, pero no está enlazada a las páginas.

No es la única carencia hipertextual: bajo “Mapa de aventuras” se ofrece la versión web del mapa de Tomás López que apareció por primera vez en la edición de Joaquín Ibarra, 1780. Este grabado sitúa sobre el mapa de España los episodios de la obra, pero estos se citan a la libresca “II, cap. 64” (y hemos visto que no hay forma de ir a un determinado capítulo), en vez de haberse sencillamente enlazado. Por cierto: este mapa, aunque bonito, es plenamente conjetural en muchos de los lugares en los que sitúa los episodios (por la sencilla razón de que Cervantes no lo dice, y porque no estaba haciendo una guía de viajes, sino una ficción), y eso se tendría que haber advertido.

Se puede remitir a una página por su URL, pero quien quiera acceder a ella deberá esperar a la descarga e inicialización del Flash, con lo que supone de engorro y esperas.

Los materiales complementarios se presentan sorprendentemente como imagen, con lo cual no se pueden copiar sus textos (un estudiante para hacer un trabajo, por ejemplo), ni los buscadores pueden encontrarlos, ¡ni siquiera el propio buscador de la aplicación! Quien quiera saber qué ediciones hubo en Londres o London (que de las dos formas lo llaman) en las “Ediciones en el tiempo” se tiene que poner a pasar las estampitas hasta encontrarla. Por suerte, luego se puede acceder a la reproducción íntegra de cada edición en la Biblioteca Digital Hispánica.

Lo mismo puede decirse de otros materiales complementarios, como la sección sobre libros de caballerías, condenados a ser meras fotos de textos…

Interactividad no quiere decir que aparezcan músicas, ni que crujan las hojas cuando se pasan: la verdadera función de una obra digital es poderse buscar, copiar y reutilizar: que dé acceso no sólo a palabras, sino a escenas y personajes. Que permita el marcado y la anotación para el trabajo personal o de clase. Que presente diccionarios contextuales y aclaración de alusiones.

A esta edición de escaparate no le faltan los tics de la cibermodernidad; compartir pedazos en FaceBook o presentarse con un video en YouTube, o las galerías de imágenes a lo Flickr, donde tampoco se puede buscar nada; pero no es una edición ni para leerla (si la lectura se interrumpe, habrá que apuntar en un papel aparte en qué página se estaba, para volver luego a ella: no hay marcadores). Tampoco es una edición para trabajar con ella, porque no se puede anotar, y las comparaciones con otras ediciones se tendrán que hacer de forma manual.

13 comentarios

Dubitador dijo...

Seria interesante conocer quien hizo y aprobó el encargo y tambien cuanto costó la broma.

Este es uno de tantos ejemplos de las barbaridades a que propende el asunto Flash.

Justas fueron las quejas contra el explorador de Microsoft y su pretension de imponer un HTML de cosecha propia, obligando a los desarrolladores a duplicar el trabajo para que las paginas pudieran mostrarse en ese navegador. Flash es practicamente lo mismo y aun peor.

05 noviembre 2010 09:36
SuperSantiEgo dijo...

Cuando lo vi la primera vez sólo pude pensar que bonita fachada, pero luego no hay nada detrás. Menuda chapu, y lo que habrá costado.

05 noviembre 2010 10:05
galderich dijo...

De esto se dice actuar de cara a la galeria pero poco substancia

05 noviembre 2010 13:26
Gorki dijo...

En mi blog hay una sección que se llama Hemeroteca, donde hablo de hechos y personajes de hace 70 años, el arte modernistas, el crimen del expreso de Andalucía, la inuguración de la Estatua de la Libertad, la muerte de Manolete y cosas por el estilo.

La infotmación la obtengo de dos colecciones revistas heredadas La esfera y Estampa. Me enteré que abrían la Hemeroteca Nacional y me alegré, pues pensé que podría documentar mejor mis temas, pero una colección de revistas totalmente imposible de utilizar.

Por poner un ejemplo, quería hablar sobre el pintor y fotógrafo Loigorry Pimetel, pues fue amigo de mi suegro y tengo por ello una buena cantidad de fotografías con gatos vestidos, uno de los temas más característicos de su última etapa, (años 50), como fotógrafo. Sabiendo que fue ilustrador de la Esfera y Blanco y Negro, fui incapaz de localizar un solo dibujo en la HN, cuando me consta que La Esfera siempre pone quién son los ilustradores.

En efecto, el trabajo de la Biblioteca Nacional está hecho con la intención de que no se copien, algo inconcebible en un organismo cuya intención debería ser la difusión de sus contenidos. Curiosamente hemerotecas como la del ABC y la Vanguardia, hechas con mentalidad comercial, en cambio faciliten al máximo la búsqueda y copia de sus contenidos.

El mal uso de nuestros impuestos es una constante en este país, la Hemeroteca y el Quijote son nuestros, han salido de nuestros impuestos, pero el Estado a través de sus Organismos delegados, no nos deja disfrutar de NUESTRAS obras.

05 noviembre 2010 14:37
Alvi dijo...

¿Cuándo se editará digitalmente pensando el texto en red, teniendo en cuenta que el lector debe poder acceder narrativamente y según su gusto a episodios, personajes, cronologías de la narración, informaciones adicionales, etc.? ¿Es que ya los editores no editan, y sólo transcriben?

07 noviembre 2010 13:07
Andran dijo...

Si la memoria no me falla creo que ví algo muy parecido en una exposición que hicieron en la Biblioteca Nacional.
Me parece que lo único que han hecho ha sido trasladar una exposición sobre el Quijote a una página web aprovechando todo lo que tenían y sin modificar nada.

He visto varias exposiciones en la Biblioteca Nacional y la forma de navegar por la aplicación y la organización de los temas es calcada.

Enhorabuena por el artículo.

07 noviembre 2010 14:09
Germán dijo...

¡Dios mío, que me saquen los ojos!
Qué cosa más mala, más cutre y más impresentable han hecho con mis impuestos. ¿Esto es interactivo?, luego sale una señora en la tele diciendo que han grabado el crujir de las hojas tal cual y zarandajas de esas. Esto es una soplagaitez que habrán presupuestado en un pastizal y se la han encargado al hijo de uno de ellos que sabe mucho de hacer webs.

07 noviembre 2010 22:11
José Manuel Lucía Megías dijo...

Todas las críticas y comentarios son siempre muy bien venidos, sobre todo si ayudan a mejorar los proyectos. Pero estas críticas tienen que hacerse teniendo en cuenta la finalidad del proyecto que se está analizando y comentando, y no los deseos de un usuario concreto. De otra manera, resulta una total pérdida de tiempo, ya que se le achacan defectos y carencias que nunca se quisieron atender y se obvian y olvidan las novedades que sí que se ofrecen. Así sucede con la fallida crítica de José Antonio Millán, publicada en su blog “Libros y Bitios”, sobre el “Quijote interactivo” de la Biblioteca Nacional de España, del que he tenido la fortuna de ser su asesor científico.

El “Quijote interactivo” de la BNE no es una edición digital del “Quijote”. Algunos de los aspectos que se critican por su ausencia en el proyecto actual (y muchos otros más), los estamos teniendo en cuenta en el grupo de trabajo que estoy dirigiendo desde el Centro de Investigación del Texto Digital a la hora de configurar la planta de la edición crítica digital del Quijote en la que estamos trabajando y que verá la luz antes del 2015.

Pero nada tiene que ver con el “Quijote interactivo”, que es una propuesta científica que viene a ofrecer nuevas posibilidades de difusión frente al modelo tradicional de la biblioteca digital patrimonial en la que se inserta, que no es otra que la Biblioteca Digital Hispánica (BDH).

El proyecto busca su finalidad en la difusión de un TESTIMONIO a una calidad hasta ahora NUNCA vista en la red (los dos ejemplares de las ediciones príncipes cervantinas conservadas en la BNE), al que se le han añadido algunos elementos que permitan al lector un acercamiento a una lectura digital del mismo que nunca podrá realizar: el sonido real del paso de las páginas (que ha sido uno de los aspectos que más usuarios no especialistas han valorado, a pesar de que nadie en el equipo tenía mucha fe en ello) y el hecho de que este no se realice como una mera acumulación de imágenes digitalizadas; pero al mismo tiempo queríamos ofrecer información sobre el TEXTO de estos testimonios (no tanto del TEXTO del “Quijote”, que implica unos trabajos filológicos que estamos realizando para la edición crítica digital antes indicada); por eso se ofrece, también por primera vez, una transcripción (que no una edición) del texto, organizada línea a línea para que el usuario pueda tener conciencia de la doble naturaleza de la información que se le ofrece (del objeto digital y de su contenido). Y por último, para seguir difundiendo la riqueza documental de la Biblioteca Digital Hispánica, se han incorporado algunos materiales de su CONTEXTO, todo ellos realizados expresamente para este proyecto: mapa de aventuras, ediciones en el tiempo, libros de caballerías y la vida en el siglo XVII, que permite acceder a objetos digitalizados ya y difundidos en la BDH.

Más interesante me ha parecido el comentario sobre el concepto de “interactivo”. Estamos en un momento de inicio de una nueva época de difusión, y es importante comenzar a delimitar los conceptos, limitar su uso y acepciones, para así poder seguir avanzando en el conocimiento. José Antonio Millán critica, por último, el proyecto por considerarlo poco interactivo, y de nuevo, al definir “interactivo” (“la verdadera función de una obra digital es poderse buscar, copiar y reutilizar: que dé acceso no sólo a palabras, sino a escenas y personajes. Que permita el marcado y la anotación para el trabajo personal o de clase. Que presente diccionarios contextuales y aclaración de alusiones”), lo que está definiendo es una “edición digital”, lo que nunca ha sido ni ha querido ser el Quijote interactivo… es como pedir que esta crítica al proyecto en el blog personal de José Antonio Millán sea evaluado como un ensayo científico. Pero no creo que “interactividad” sea lo que indica Millán: nuestro proyecto es interactivo porque, como indica el DRAE, hemos pretendido que exista un dialogo entre los materiales que se ofrecen y el usuario, que pueda elegir lo que en cada momento quiera consultar y disfrutar.

Estamos en un momento en que es necesario crear nuevas estructuras para organizar la información aprovechando las nuevas posibilidades que nos ofrecen las TICs (que no pasan en ser indexadas por Google ni almacenar los materiales disponibles en la red en el disco duro de nuestro ordenador, por ejemplo). Y hemos de superar la confusión de términos y de conceptos y de no medir los proyectos nuevos que se ofrecen con la regla del pasado (si no es con la de los intereses creados).

José Manuel Lucía Megías
Director del CITeD/ UCM
Asesor científico del “Quijote interactivo” de la BNE

09 noviembre 2010 02:09
Esther Acereda dijo...

Buenos días,

Creo que hay un error en la información que hace referencia a que no se puede bajar el libro. Cuándo se indica “compartir”, si se entra a l’opción “enviar un e-mail” te permite enviar la página o el libro entero. No lo he probado, pero supongo que es posible. Os lo comento por si lo queréis comprobar.

Atentamente

10 noviembre 2010 13:09
Margarita Ferrer dijo...

Buenos días!.
Soy argentina y vivo en Azul, Ciudad Cervantina de la Argtentina desde el año 2007.
El Quijote interactivo me ha parecido sensacional y estimo que las críticas tienen un tufillo algo raro. Me da la impresión de que las críticas se centran sólo en dos cuestiones que no hacen a lo que realmente es “El Quijote interactivo”: Si se puede bajar o no bajar el texto a la máquina, y cuánto ha costado el proyecto.
Este tipo de críticas, ya las conocemos también por este lado del Atlántico.
Vamos!!! Un poco más de generosidad crítica!!!! Y mirad y considerad todo, no solamente lo que queréis ver! ( ¡Qué bien me ha salido este castellano de allende el mar!)
Margarita

13 noviembre 2010 14:55
Claudia Bogliano dijo...

Hola,vivo en Azul, ciudad Cervantina de la Argentina.Soy directora del museo de arte Lopez Claro de esta ciudad.
Este Quijote interactivo me ha encantado.
Las críticas son buenas cuando construyen; estimo que las expuestas mas arriba no lo son.
A disfrutar de este Quijote !!!!!!!!!! Basta de mezquindades.
Claudia

13 noviembre 2010 17:34
Antonio Alonso Núñez dijo...

Yo sólo soy un simple lector simple, que ni siquiera sabe bien ni le importa qué sea eso de la interactividad, a quien los tecnicismos que usa Millán son cosa que lo abruman, y a quien los que usa Lucía lo aplastan.
Yo sólo vi y veo un texto borroso, de impresión no clara, de fondo oscuro y tenebroso, de tamaño insuficiente para lectura en pantalla, y con un monstruoso zoom de tamaño único descomunal que sólo permite ver cuatro palabras en la pantalla.
Esto me bastó para cerrar, horrorizado, la página web (o como se llame eso).
Después de leer el artículo de Millán veo que la cosa es muchísimo peor aún de lo que bastó para horrorizarme. Y la contraargumentación de Lucía es inaceptable: Si lo que quisieron hacer es algo que al parecer lleva hasta el orgasmo a un grupo de amiguetes, pues con su pan se lo coman, pero no es plato para los lectores del común, y que por tanto deben promocionarlo tan sólo entre los amiguetes, no entre los lectores del común.
Sólo un comentario más: A mí me parece una horterada ridícula eso del feo ruido que le ponen al pasar de las hojas, que es antiestético por hiperartificioso y chabacano, y que por estas cualidades molesta más aún que el ruido infernal de las motos y coches que pasan por la calle. Y, sobre todo, una cuestión que me tiene asombrado: ¿Tan difícil sería arreglar la cosa de tal manera, que el lector pudiera oír o dejar de oír ese ruido a su antojo, y que caso de querer oírlo pudiera ponerlo incluso con una carretada de watios y de decibelios como la de los conciertos pop?.

27 noviembre 2010 02:19
pedro ojeda escudero dijo...

Uno, que de aplicar las herramientas de la web 2.0 a la lectura del Quijote, no puede estar más decepcionado con la realización de este proyecto de la Biblioteca Nacional, así como el absurdo en el que ha caído la Real Academia con una insoportable edición del Quijote leído.
Estos proyectos hubieran estado bien hace 10 años, no ahora: ahora, con el mismo dinero, se hubieran conseguido logros mejores.
Cito esta entrada tuya tan lúcida en mi análisis de estas novedades y, de paso, te invito a ti y a tus lectores a leer la primera lectura colectiva y virtual del Quijote en la que se aplican estas herramientas de la web 2.0. La hemos llevado a cabo en mi blog desde abril del 2008 hasta el pasado mes de noviembre.
Ampliada y corregida, se convierte en una iniciativa de mi blog, amparada en las próximas semanas por la web de la Universidad de Burgos, a cuyo claustro de profesores pertezco, y una red de bibliotecas universitarias.
Dejo los enlaces:
De mi entrada con el análisis de estas iniciativas: http://laacequia.blogspot.com/2010/12/novedades-cervantinas-en-la-biblioteca.html
De la lectura del Quijote: http://sites.google.com/site/lecturadelquijote/home
En breve se publicarán las bases de esta lectura permanente de la obra.

10 diciembre 2010 16:44